Sociedad de Pediatría de Atención Primaria de Extremadura

Anemia intensa en la primera infancia

B. Rodríguez Jiménez(1), C. Zarallo Reales(1), M.D. de la Maya Retamar(2), M. Delgado Cardoso(1), C. Vicho González(1), R. Espejo Moreno(1), B. De la Vega Castro(1), M. Segura González(1), T. Fernández Martínez(1), M. Fuentes Guerrero(1)
(1) Servicio de Pediatría (Hospital Materno Infantil de Badajoz). (2) Servicio de Hematología (Hospital Materno Infantil de Badajoz)

Objetivo:

La anemia es un hallazgo frecuente en la infancia. Los síntomas suelen ser inespecíficos. Las causas pueden ser múltiples, pero casi siempre con una historia clínica y un examen físico completo, unido a un estudio analítico se llega fácilmente al diagnóstico.

Material y métodos:

Niño de 2 años, sin antecedentes personales de interés, con clínica de astenia y palidez de 2-3 semanas de evolución. Dos semanas antes refieren cuadro de infección respiratoria.

En la exploración física destaca taquicardia sinusal, un soplo sistólico y palidez cutánea, con un buen estado general.

Resultados:

Se realiza analítica desde atención primaria donde se observa: Hb: 6.4 g/dl, Hcto: 21.9%, VCM 80,5 fl, CHCM 32 g/dl, reticulocitos: 0.1%. Leucocitos y plaquetas normales. Perfil férrico normal.

Estudio de hemólisis y serología de patógenos negativa. Estudio de médula ósea con serie eritroide disminuida.

Precisó transfusión de concentrados de hematíes, con posteriores controles analíticos con cifras de hemoglobina y reticulocitos dentro de la normalidad.

Conclusiones:

La eritroblastopenia transitoria de la infancia es una enfermedad hematológica benigna, caracterizada por anemia arregenerativa y aplasia medular transitoria de la serie roja, con recuento normal de glóbulos blancos y plaquetas. Afecta a niños sanos entre 1 y 4 años. Su diagnóstico precisa exclusión de otras causas. La etiología es deconocida ,y se ha relacionado con infecciones virales previas.

El tratamiento consiste básicamente en observación y, en casos severos, transfusión de glóbulos rojos. El pronóstico es bueno, con recuperación completa en 2-4 semanas, prácticamente sin recurrencias.