Sociedad de Pediatría de Atención Primaria de Extremadura

La OPE nuestra compañera durante los últimos cinco años

Mª Isabel Corral Muñoz

Me piden que escriba algo sobre la OPE, sobre lo que ha significado en nuestras vidas y lo que nos plantea profesionalmente para el futuro. Y ahora al hacerse efectiva esta Oferta extraordinaria de consolidación Publica de Empleo, tengo que recurrir a nuestra página web para saber cuándo se convocó, puesto que de las primeras cosas que hecho al tomar posesión de mi plaza ha sido romper todos los papeles, boletines, resoluciones de las distintas fases, baremos, currículum, etc., y lo he hecho realmente con satisfacción.

Han sido cinco largos años pendiente de un tedioso proceso, en el que pese a ser beneficiada, siempre pensé que no era justo para todos. Me explico, yo que soy de le época en que los concursos oposiciones eran algo más regular en el tiempo y con una normas claras, en la que la situación administrativa era comprendida por todos los participantes y en un mundo en el que se empezaba poco a poco y con el tiempo, los méritos, los concursos de traslado se caminaba hacia una situación profesional más cómoda, dejando a las nuevas generaciones aquellas plazas de mas engorroso desempeño.

No vi justo que la OPE y, por lo que Atención Primaria se refiriere, sacara unas plazas (por cierto no en todos los casos las que ocupábamos los interinos, sino las que convinieron en cada Área) sin haber dado opción con anterioridad a los propietarios para avanzar y recolocarse, si así lo deseaban, en las plazas vacantes, posiblemente mejores que las que ocuparon en su día tras las distintas oposiciones habidas. Esto bajo mi punto de vista y siento que alguno no estéis de acuerdo. Creo que hubiese sido lo correcto y finalmente con aquellas vacantes producidas hacer una oferta, y ofrecerlas de una vez, sin tres fases en la provisión de las mismas, una oferta global a nivel del extinto territorio Insalud, similar a la adjudicación de plazas MIR. Hubiese sido algo sencillo y más gratificante para todos, pues en segundas y terceras vueltas se han obtenido mejores plazas que en la primera entrevista y todos conocemos casos. 

Esta OPE ha detenido en parte muchas acciones, pues ha creado una situación de provisionalidad que ha impedido emprender actuaciones a largo plazo en la vida profesional y en la vida personal y familiar. Para aquellos compañeros que daban un salto acercándose a sus lugares de origen, la situación de provisionalidad no ha sido fácil de vivir cada principio de curso, cada nuevo embarazo, cada proyecto de futuro......

Siempre he priorizado mi vida personal por encima de la profesional, ya obtuve plaza de Pediatra de Atención Primaria en al año 84 y no tome posesión, he estado en situación de excedencia voluntaria como Médico Titular durante todos estos años de interinidad en pediatría, es decir el sabor de una plaza fija ya lo había degustado, durante estos años siempre he trabajado o, lo he intentado al menos, como si fuera para siempre. Este cambio de destino es costoso, requiere de una nueva adaptación a las peculiaridades de los nuevos niños y sus familias, pero tiene algo de ilusionante y no por el carácter laboral fijo, sino por intentar mejorar, organizar la asistencia con calidad, ofrecer lo mejor de la experiencia acumulada, innovar, desrrutinizar, e intentar mejorar la calidad de vida profesional. Un profesional que trabaja con confortabilidad trabaja con ganas, emprende nuevas actividades y mejora la atención a su población adscrita.

Concluyendo ha sido un proceso farragoso, en el que finalmente somos estatuarios fijos, si bien no ha llovido a gusto de todos, espero que de ahora en adelante nada nos frene y podamos embarcarnos en proyectos sin plazo y entre todos mejorar la calidad y calidez asistencial de la población infantil a la que atendemos.

Enhorabuena a todos y a todas y espero que lluevan vuestras iniciativas e implicación en esta nuestra Sociedad de Pediatría de Atención Primaria, que gracias al esfuerzo de todos nosotros se ha ido consolidando. Es un momento más que oportuno para darle un buen empujón.